En este artículo voy a intentar definir y explicar lo que entendemos por bienestar emocional, lo que podemos poner de nuestra parte para contribuir a su cuidarlo y alguna herramienta que pueda servirte de ayuda.
Bienestar emocional
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el bienestar emocional «es un estado de ánimo en el cual la persona se da cuenta de sus propias aptitudes, puede afrontar las presiones normales de la vida, trabajar productivamente y contribuir a la comunidad».
Podemos decir entonces que con bienestar emocional nos referimos a ese estado que nos permite sentir, pensar y actuar de forma plena en nuestro día a día. Estar seguros de nuestras capacidades, tener confianza en que sabremos afrontar lo que el día nos depare y llegar a la noche satisfechos.
Factores que influyen nuestro estado emocional
Hay varios factores que influyen en nuestro estado de bienestar emocional desde el punto de vista biológico y psicológico, sociales y ambientales, desde nuestra propia personalidad, hasta factores externos que no podemos controlar.
- En cuanto a factores biológicos podemos resaltar:
- La genética: La predisposición genética puede influir en nuestras tendencias emocionales y nuestra capacidad para regular las emociones.
- La neuroquímica: La actividad de neurotransmisores como la serotonina, la dopamina y la noradrenalina puede afectar nuestro estado emocional.
- La salud física: La salud física, incluidos aspectos como el sueño, la nutrición, el ejercicio, padecer alguna enfermedad puede tener un impacto significativo en nuestras emociones.
- Podemos algunos factores psicológicos:
- Experiencias pasadas que han supuesto algún trauma, situaciones de desamparo, de soledad, de incomunicación, de miedo, aislamiento… o eventos significativos, pueden influir en cómo respondemos emocionalmente a situaciones similares en el presente.
- Creencias y pensamientos. Nuestras creencias sobre nosotros mismos , los demás y el mundo material que nos rodea, dan forma a nuestras emociones. Dependen de procesos de aprendizaje que hemos tenido y del estatus social y cultural en el que hemos crecido.
- Los patrones de pensamiento negativo o distorsionado, sesgos de la mente que priman lo negativo de nuestro día a día.
- Habilidades de afrontamiento: La capacidad para manejar el estrés y las adversidades de manera efectiva.
- Factores sociales y ambientales:
- Relaciones interpersonales: La calidad de nuestras relaciones con amigos, familiares y compañeros de trabajo puede afectar nuestro bienestar emocional.
- Apoyo social: Sentirse apoyado y conectado con otros puede promover emociones positivas si sucede o negativas en e caso contrario.
- Entorno físico: Factores como el clima, el entorno laboral y el entorno urbano o medio natural, pueden influir en nuestro estado emocional.
- Factores situacionales:
- Eventos estresantes: Experiencias estresantes como cambios importantes en la vida, conflictos interpersonales o problemas financieros pueden desencadenar emociones negativas.
- Éxito y fracaso: El logro de metas y objetivos puede generar emociones positivas como la satisfacción y la alegría, mientras que el fracaso puede provocar emociones negativas como la frustración y la tristeza.
Es importante reconocer que estos factores interactúan entre sí de maneras complejas y que nuestro estado emocional es el resultado de una combinación de influencias biológicas, psicológicas, sociales y situacionales. Desarrollar una mayor conciencia de estos factores nos ayuda a entender y gestionar mejor nuestras emociones.
Ayuda a tu bienestar emocional
Debes saber que no tenemos por que dejarnos arrastrar por las emociones , podemos reconocer y optar por cambios para ayudar a nuestro bienestar emocional. Te voy a enumerar algunas.
1.- Relaciones saludables: Mantener y buscar las relaciones positivas y de apoyo con amigos, y seres queridos proporciona un sentido de pertenencia, conexión y apoyo emocional. Busca a las personas que te ayudan a crecer y con las que te sientas a gusto.
2.- Autocuidado: Dedica tiempo regularmente para cuidar de ti, busca lo que mejor se ajuste a tu personalidad y tu día a día e intenta practicar
- un poco de actividad física que puede ser desde el paseo tranquilo al deporte que más te guste o al gimnasio.
- Descansa adecuadamente, respeta tus tiempos de sueño,.
- Alimentación saludable, respeta los horarios de comida para no encontrarte débil y cansado.
- Da un tiempo a relajación con prácticas de atención plena, para ser más consciente de tí y de lo que te rodea.
3.– Expresión emocional: Date permiso para expresar y procesar las emociones de manera saludable. Utiliza cualquier forma de arte como la escritura, pintura, dibujo, modelado, la música.
También fomentar la comunicación abierta con personas de confianza, puede aliviar el estrés y promover la claridad emocional.
Cuando ponemos palabras a las emociones para contarlas, las hacemos conscientes y nos ayuda a asumirlas.
4.- Gestión del estrés: Desarrolla habilidades efectivas de afrontamiento del estrés, como la resolución de problemas, el establecimiento de límites saludables, la gestión del tiempo y la práctica de técnicas de relajación, que pueden ayudarte a reducir la carga emocional.
- Prácticas de gratitud: Cultivar una actitud de gratitud y enfocarse en las cosas positivas de la vida puede promover emociones positivas como la alegría y la satisfacción.
- Establecimiento de metas: Establece metas realistas y significativas, tanto a corto como a largo plazo, y trabaja hacia su logro.
- Conecta con la naturaleza: Pasar tiempo al aire libre y conectarse con la naturaleza puede tener efectos terapéuticos en el estado de ánimo y reducir el estrés y la ansiedad.
- Cultivar pasiones e intereses: Participa en actividades que te apasionen y nos brinden alegría y satisfacción .
- Acepta el cambio y la imperfección es parte natural de la vida y que todos tenemos limitaciones y fallos.
Integrar estas prácticas en nuestra vida diaria puede ayudarnos a fortalecer nuestro bienestar emocional y afrontar los desafíos con mayor eficacia.
En Resumen
Aceptar lo que nos sucede, conocernos tanto como funciona mi cuerpo, como mi mente y observar nuestros prejuicios y limitaciones son fundamentales para aprender a gestionar nuestras emociones y mejorar nuestro bienestar emocional.
Recuerda que el arte puede ayudarte a ello
“Descubre todo lo que el arte puede hacer por ti”
Recomendaciones:
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Si necesitas ayuda o información
https://www2.cruzroja.es/que-hacemos/salud/salud-emocional
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Si quieres crecer en el autoconocimiento
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Lectura recomendada
- Viktor Frankl. (2015). El hombre en busca de sentido. Herder Editorial, S.L., Barcelona.